Dormir lo suficiente es importante para la salud y el rendimiento escolar de los niños. El sueño es esencial para que se sientan descansados y alerta. La cantidad adecuada de horas de sueño hace que su mente y su cuerpo se vitalicen y ellos despierten sintiéndose renovados y listos para comenzar un nuevo día.
La mayoría de los niños, según su edad, tienen las mismas necesidades en lo que se refiere a la cantidad óptima de sueño. Las siguientes pautas te ayudarán a determinar cuántas horas de sueño son idóneas para un niño, e incluyen formas fáciles de que las obtengan.Contenido relacionado: Cómo generar hábitos saludables en nuestros hijos
¿Cuántas horas de sueño necesitan entonces?
No existe un número preciso de minutos u horas de sueño por la noche que les garantizará un descanso profundo, pero de acuerdo con su edad y estilo de vida, lo que se recomienda está dentro de cierto rango.
Para que se mantengan alerta durante el día, lo mejor es que sigan estas pautas establecidas por la National Sleep Foundation (en EUA):
- Niños pequeños (de 1 y 2 años): los niños pequeños necesitan de entre 11 y 14 horas de sueño cada noche.
- Niños en edad preescolar (de 3 a 5 años): los niños de preescolar deben dormir de 10 a 13 horas por noche.
- Niños de primaria y preadolescentes (de 6 a 13 años): los niños de primaria y secundaria deben hacer lo posible por dormir de 9 a 11 horas cada noche.
- Adolescentes (de 14 a 17 años): a medida que los niños crecen, su necesidad de dormir disminuye ligeramente; los adolescentes requieren de 8 a 10 horas de sueño nocturno.
Tomar en cuenta la flexibilidad
A algunos niños les sienta bien el extremo inferior del rango y otros tienen que adoptar el límite superior para desempeñarse con éxito. De hecho, en ocasiones pueden añadirse una o dos horas a cada uno de estos rangos, dependiendo del niño.
Aun así, alejarse demasiado de la cantidad recomendada se asocia con el aumento de peso, la inmunidad reducida, la depresión y el bajo rendimiento académico.
Los efectos negativos de dormir poco o demasiado no son sólo físicos, también pueden interferir con la salud emocional. Los resultados más deseables en actitud, estado de ánimo y capacidad de atención dependen en gran medida de que los niños duerman la cantidad adecuada de horas.
Formas fáciles de que duerman más
Si para tu hijo dormir lo suficiente parece una meta difícil de lograr, hay algunos consejos que puede probar. Para empezar, debe tratar de acostarse todas las noches a la misma hora y así permitir que su cuerpo se adapte a un horario regular de sueño y vigilia.
Los niños se benefician de un horario fijo de sueño. Antes de dormir puede leer, meditar, escribir un diario o darse un baño tibio para relajarse.
Para dormir bien debe evitar el consumo de cafeína y comida picante o frita antes de acostarse. La temperatura ideal de una recámara está entre los 15 y 20 °C, también es conveniente que no entre mucha luz y pueda bloquear el ruido molesto o usar ruido blanco para conciliar el sueño.
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El objetivo es que tu hijo reciba la cantidad de sueño que necesita para sentirse vital y poder rendir al máximo tanto en la escuela como en el resto de actividades diarias.
El Colegio Chimalistac busca el bienestar de sus alumnos en todos los niveles. También conocemos la importancia de que tengan todos los elementos para aprender y rendir al máximo en la escuela. Aquí te compartimos una guía para que aceleres el aprendizaje de tu hijo:
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