Tal vez te preocupe que tu hijo no esté haciendo muchos amigos. O te preguntas si es tímido o introvertido. Pero aunque podamos pensar que estos dos términos son intercambiables, será mejor no confundir el uno con el otro.
La introversión es un rasgo de la personalidad, mientras que la timidez tiene su raíz en la ansiedad durante la interacción con personas desconocidas.
Los niños introvertidos pueden sentirse contentos y tranquilos en su propia burbuja, mientras que los niños tímidos no necesariamente son introvertidos. Quizás desean interactuar con otros niños, pero la ansiedad paralizante y un sentimiento de vergüenza se apoderan de ellos.
Es claro que los padres queremos que nuestros hijos prosperen en situaciones sociales y que se sientan cómodos con otras personas. La buena noticia es que la timidez a menudo puede superarse y hay mucho que podemos hacer al respecto. A continuación, encontrarás 7 consejos que le ayudarán a tu hijo a vencer su timidez:
- Prepara a tu hijo para que haga frente a nuevas situaciones
Los lugares nuevos con personas desconocidas pueden parecerles abrumadores a los niños tímidos. Ayúdale a tu hijo a adaptarse a una situación como ésta al explicarle de manera anticipada lo que podrá esperar y al presentarle el nuevo entorno poco a poco.
Si empezará a asistir a una escuela con más alumnos, permítele conocer a los maestros y visitar las aulas antes del primer día de clases. Ahí es donde pasará la mayor parte del tiempo, así que la oportunidad de acostumbrarse al nuevo entorno puede hacer que se sienta más cómodo antes de que comiencen las clases.
Otra opción es organizar citas para que juegue con otro niño y empiece a crear un vínculo con él. El juego de roles también puede ser de gran ayuda en estos casos.
2. Dale un espacio para que exprese sus emocionesAl igual que a cualquier persona tímida, a los niños tímidos a veces les cuesta trabajo expresar sus emociones. Esto puede llevarlos a sentirse incomprendidos y a reprimir ciertas emociones a medida que crezcan.
Como padre, puedes alentar a tu hijo a comunicarlas en actividades que le faciliten hablar de cómo se siente acerca de una situación en específico. Pídele, por ejemplo, que se exprese creativamente a través del dibujo, o que use personajes ficticios para contar una historia sobre una situación parecida a ésa.
No tiene que ponerse a sí mismo en el centro de la narración, pero al ser capaz de expresarse así, aun de forma indirecta, sentirá que alguien lo escucha y que puede compartir con los demás lo que ocupa su mente.
3. Pase lo que pase, no le digas a otras personas que tu hijo es tímido
Comentarle “mi hijo es tímido” a otras personas puede ser una manera fácil de excusar su comportamiento. Sin embargo, esto podría resultar más perjudicial que útil para él.
Etiquetarlo como tal podría orillarlo a convencerse de su timidez y de que no habría nada por hacer para mejorar la situación. Incluso podría convertirse en obstáculo para no perseguir nada que le causara un sentimiento de ansiedad, lo cual haría que perdiera valiosas oportunidades para superarse.
Referirse a un hijo como "tímido" también suele ser confuso y vergonzoso para un niño.
Los padres desean alentar a sus hijos a intentar cosas nuevas y desarrollar confianza en sí mismos conforme conquistan el mundo con pequeños o grandes hitos. Al decirle constantemente a los demás que tu hijo es tímido sólo estarás reafirmando sus dudas acerca de sus capacidades.
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4. Enséñale a ser cortés a pesar de que se sienta nervioso
La timidez no debe ser excusa para mostrarse irrespetuoso. Es importante que podamos enseñar cortesía a un hijo más allá de que sienta timidez. La enseñanza, por supuesto, debe provenir de un lugar de amor y comprensión. También estás reconociendo que se siente incómodo en situaciones con gente que aún no conoce.
Ayúdale a entender que la timidez es normal, como lo es preservar límites en consideración suya, pero que tener una actitud grosera no lo es. Quizá no se dé cuenta de que en ocasiones la timidez puede confundirse con un comportamiento grosero.
Por ejemplo, no responder a los demás con cortesía o ignorar el trato amigable puede parecer un gesto antipático. Enseñarles a los niños a responder de forma apropiada en situaciones sociales, a pesar de su posible ansiedad, los acercará un paso más a que venzan la timidez.
5. Elogia y corrige en privado el comportamiento
¿Has visto a algún padre o madre regañando a sus hijos en público? Si es así, sabrás la sensación de incomodidad que suele causar en quienes están mirando. Ahora imagina lo incómodo que se siente el niño del lado receptor.
Lo último que quiere un niño tímido es volverse centro de atención. Siempre que necesites abordar o corregir el comportamiento de tu hijo, lo mejor es que lo hagas en privado. Si deseas elogiarlo también por su buen comportamiento, tal vez lo aprecie más en privado.
Piensa en que ya sea que quieras brindarle atención positiva o negativa, ambas pueden ser vergonzosas para un niño si eso atrae miradas ajenas.
6. No abrumes a un niño tímido con demasiadas opciones
Los niños tímidos con frecuencia son tímidos porque tienen miedo de sentirse incómodos en compañía de otras personas. Esto puede suceder cuando se les da demasiada rienda suelta en un entorno determinado. Una oportunidad ilimitada de opciones y desenlaces puede resultarles abrumador.
Reduce las opciones a unas cuántas para que se desestresen. Ejemplos de tal enfoque incluyen pedirles que compartan experiencias recientes o darles tan sólo un puñado de actividades a elegir.
7. Inscribe a tu hijo en clases de teatro o artes escénicas
A pesar de lo que parezca inicialmente, inscribir a tu hijo en clases de artes escénicas puede contribuir a que supere su timidez.
Participar en artes escénicas es una excelente manera para que los niños actúen detrás de la máscara del personaje que están interpretando. Actuar en un escenario podría quitarles la presión de hacerlo. Solamente recuerda no insistir de más.
Actividades como los deportes y los talleres extraescolares a veces también tienen un efecto similar, pues representan un espacio para que los niños socialicen mientras se concentran en una tarea productiva.
Vencer la timidez normalmente conlleva mucho trabajo, pero al aplicar estas estrategias simples, le ayudarás a tu hijo a ir adquiriendo más confianza y superar paso a paso situaciones complicadas para él.
Parte de nuestra misión educativa en el Colegio Greenland es fomentar un ambiente de calidad con calidez en el que nuestros alumnos puedan sentirse cómodos en todo momento. Además contamos con un taller socioemocional que les ayuda a expresar sus emociones y desarrollar autocontrol.
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