Como padre, seguramente buscas que tu hijo sobresalga en el colegio y desarrolle su potencial cognitivo al máximo. La memoria es una de las habilidades cognitivas más importantes y es esencial en muchas áreas de la vida. Para el estudio resulta indispensable, pues gran parte del aprendizaje consiste en memorizar.
La memoria de trabajo es particularmente útil: es la memoria usada en procesos que requieren de almacenamiento a corto plazo de información. Las sub-habilidades relacionadas con la memoria de trabajo constituyen el núcleo de cualquier tipo de aprendizaje.
La memoria de trabajo verbal es crucial para la comprensión lectora y la resolución de problemas matemáticos planteados a modo de enunciado. La memoria de trabajo espacial es determinante para recordar colores y formas así como para las matemáticas de nivel superior, que incluyen la geometría y el cálculo.
Enseñarles técnicas de memoria a los niños para que puedan mejorar en este aspecto les será de mucha ayuda. La clave está en presentarlas como divertidas y útiles. Apórtale estas sugerencias a tu hijo para que empiece a practicarlas por cuenta propia.
Combinar ejercicio y tecnología. El ejercicio es óptimo para el cerebro. Anima a tu hijo a que se grabe a sí mismo leyendo sus notas y apuntes en un iPod o iPad. Si sale a caminar o a trotar por el vecindario le servirá escuchar su propia voz leyéndolos.
Hacer conexiones. Tu hijo puede valerse de diferentes formas para establecer conexiones en su mente. Es difícil recordar algo con sólo leerlo una vez. Por ejemplo, puede identificar un par de puntos clave en lo que ha estudiado. O, bien, leer en voz alta para sí mismo o hablar sobre esto con sus padres o sus amigos.
Dividir en partes las actividades. Al dividir tareas en partes más pequeñas tu hijo recordará más fácilmente todo lo que tiene que hacer. Por ejemplo, cepillarse los dientes, lavarse la cara y peinarse el cabello, una después de la otra. De tal modo, podrá recordar realizar tres tareas al haber identificado las partes de una sola.
Estudiar con amigos en línea. ¿Sabías que tu hijo puede estudiar con sus amigos en línea? Esto le ayudará a reforzar su memoria, al enviarles mensajes de texto a sus amigos. Asimismo al idear cuestionarios breves sobre lo que esté estudiando para que los resuelvan ellos (después puede pedirles que hagan lo mismo por él).
¡Practicar, practicar, practicar! Es lo mismo en los deportes, en la música o en la danza, cuanto más practica uno, mejor se vuelve. Anima a tu hijo para que practique las rutinas que tenga que recordar, como alistarse por la mañana.
Repetir nueva información cuando se aprenda por primera vez. Al repetir el nombre de alguien o algo varias veces tan pronto como lo aprenda tu hijo logrará memorizarlo más fácilmente. Puede intentar lo mismo con nuevos números de teléfono.
Usar oraciones bobas que ayuden a recordar. Las oraciones bobas pueden ayudarles a los niños a recordar rutinas u otra información. Por ejemplo, la oración “Tarsicio siempre anota toda su tarea” podría recordarle que anotar cada una de sus tareas le facilitará poder terminarla a tiempo y en forma.
En especial la práctica es indispensable cuando se trata de que los niños perfeccionen su capacidad para memorizar. Entre más se esfuercen por memorizar diferente conocimiento mejor podrán hacerlo a futuro, esto en lo que se refiere tanto a memoria a corto y a largo plazo.
En el preescolar del Colegio Greenland consideramos que esta etapa del desarrollo es determinante, por eso fundamentamos las bases del aprendizaje de modo que se promueva el desarrollo cognitivo y psicomotor de nuestros alumnos. Inicia tu proceso de admisión con nosotros, contáctanos para recibir más información:
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