La enseñanza de buenos modales es determinante en gran medida en el camino formativo de los niños para un adecuado desarrollo tanto personal como social.
Al aprender a ser respetuosos, considerados y comunicativos desde una edad temprana, adquieren una comprensión más profunda de las normas civiles.
Además, fortalecen conexiones neuronales en el cerebro en áreas relacionadas con la empatía y la toma de decisiones, lo que contribuye a un proceso cognitivo y emocional más equilibrado a medida que crecen.
A continuación, exploraremos 10 buenos modales que son fundamentales para los niños:
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Saludar y despedirse
Enseñar a los pequeños a mirar a los ojos y ofrecer un apretón de manos al saludar y despedirse es la primera señal de cortesía, puesto que demuestra respeto e interés hacia los demás. -
Decir "por favor" y "gracias"
El uso de estas palabras mágicas no solo es signo de humildad, sino que también fomenta el reconocimiento de la ayuda de otras personas. -
No interrumpir
Esperar para hablar escuchando atentamente y con respeto es imprescindible en la comunicación efectiva y para que las personas se sientan valoradas.
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Compartir
Los pequeños que comparten con otros tienden a construir relaciones más sólidas y duraderas al promover la cooperación y la generosidad. -
Respetar la propiedad ajena
Es esencial para evitar conflictos y generar confianza en las relaciones interpersonales. Esto implica no tocar las pertenencias de los demás sin permiso o ser cuidadosos con ellas si han sido prestadas. -
Evitar las burlas
Ya sea por cualquier discapacidad, situación adversa o eventualidad, los niños deben evitar burlarse de los infortunios de los demás y mostrar una actitud empática. -
Usar palabras amables
Procurar un lenguaje amable y respetuoso es de especial importancia para evitar herir los sentimientos de quienes nos rodean y construir relaciones positivas. -
Moderar el volumen de nuestra voz
Se trata de que los chicos aprendan a no incomodar a las demás personas en sitios que requieren guardar silencio, o modular el volumen de la voz en lugares como cines, bibliotecas, en un avión, etc. -
Pedir permiso
Hacerlo siempre para pasar cuando otras personas obstruyen el paso o antes de ingresar a una habitación ajena es una gran señal de consideración. -
Ser puntual
Es la máxima muestra de respeto por el tiempo de los demás, por lo que forma parte de los buenos modales universales.
La enseñanza de cortesía y valores civiles básicos en los niños no solo contribuye al desarrollo de individuos apreciables por su comunidad, sino que también les brinda una base sólida para una vida personal y académica exitosa.
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En última instancia, fomentar buenos modales en nuestros hijos no solo es una responsabilidad parental, sino también una inversión en su futuro y en la sociedad en su conjunto.
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