En el Colegio Chimalistac seguimos demostrando que el compromiso social y ambiental es parte esencial de nuestra identidad.
En el marco del Día Mundial contra la Desertificación y la Sequía (17 de junio) logramos como comunidad un impacto positivo que merece ser celebrado y compartido con orgullo.
Gracias a la participación y constancia de todas las familias, estudiantes y colaboradores, reciclamos juntos un total de 132.60 kilogramos de materiales diversos. Este esfuerzo colectivo se traduce en beneficios ambientales que nos recuerdan que cada acción cuenta:
- Evitamos el consumo de energía equivalente a la que utilizan 7.8 viviendas en la Ciudad de México durante un mes completo.
- Ahorramos 0.93 años de agua potable, es decir, el agua que una familia consumiría durante casi un año entero.
- Prevenimos la tala de 1.18 árboles, conservando pulmones verdes que purifican nuestro aire.
- Disminuimos emisiones contaminantes equivalentes a 3.52 viajes en transporte público, lo que contribuye a un ambiente más limpio para todos.
Este mes, la participación de nuestra comunidad ha superado las expectativas y ha dejado en claro su interés en la cultura del reciclaje y la responsabilidad compartida, el cual crece año con año.
A través del reciclado de polipropileno, tapitas, latas de comida, envases multicapa que pueden transformarse en techos, y hasta cáscaras de huevo que se convierten en filtros de agua, demostramos que la creatividad y la conciencia ambiental pueden ir de la mano para transformar nuestra realidad.
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En el Colegio Chimalistac creemos firmemente que educar implica también inspirar valores que trascienden el aula. La suma de pequeñas acciones genera grandes cambios, y este reporte ambiental es prueba de ello.
Sigamos trabajando juntos por un futuro más sostenible y solidario. ¡Gracias por ser parte de esta causa que nos une y nos fortalece!