La clave para convertirse en un estudiante efectivo es aprender a estudiar de una manera más inteligente, no más difícil. Por lo general, una o dos horas de estudio al día son suficientes para obtener calificaciones satisfactorias, pero en la universidad, no hay demasiadas horas al día si uno no sabe cómo estudiar mejor.
Si bien a algunos estudiantes les va bien con un esfuerzo mínimo, esta es una excepción. La gran mayoría de los estudiantes exitosos logran salir adelante desarrollando y aplicando hábitos de estudio efectivos.
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Los siguientes son 8 de los mejores hábitos de estudio empleados por estudiantes altamente exitosos. No te desanimes, no te rindas, sólo trabaja en desarrollar cada hábito de estudio a continuación y verás que tus calificaciones subirán, tu conocimiento aumentará y tu capacidad para asimilar información mejorará.
1. No intentes concentrar todos tus estudios en una sola sesión.
¿Alguna vez te has levantado tarde por la noche gastando más energía tratando de mantenerte despierto que estudiando? Si es así, es hora de cambiar. Los estudiantes exitosos generalmente distribuyen su trabajo en períodos de tiempo más cortos y rara vez agrupan todo su estudio dentro de una o dos sesiones.
Si quieres convertirte en un estudiante logrado, entonces debes aprender a ser consistente con tus estudios y tener períodos de estudio regulares, pero más cortos.
2. Estudia de manera regular en un mismo horario.
No sólo es importante que planifiques cuándo estudiarás, sino que crees una rutina de estudio diaria y consistente. Cuando estudias a la misma hora todos los días y cada semana, el estudio se convertirá en una parte normal de tu vida.
Te sentirás mental y emocionalmente más preparado para cada sesión de estudio y cada una será más productiva. Si tienes que modificar tu horario de vez en cuando debido a eventos inesperados, está bien, pero vuelve a tu rutina tan pronto como dicho evento haya pasado.
3. Cada sesión de estudio debe tener un objetivo específico.
Simplemente estudiar sin dirección no es efectivo. Debes saber exactamente lo que quieres lograr durante cada sesión. Antes de comenzar a estudiar, establece una meta que respalde tu meta académica general (por ejemplo, memoriza 30 palabras para retener la sección de vocabulario en la próxima prueba de inglés).
4. Nunca postergues la sesión de estudio planificada.
Es muy fácil y común posponer una sesión de estudio debido a la falta de interés en el tema, o porque tienes otras cosas que debes hacer, o porque la tarea es difícil.
Los estudiantes exitosos no postergan el estudio. Si pospones tu sesión de estudio, éste será mucho menos efectivo y es posible que no logres todo lo que te hayas propuesto.
5. Comienza con el tema más difícil primero.
Como su tarea o asignatura más difícil requerirá el mayor esfuerzo y energía mental, debes comenzar con ella primero. Una vez que hayas completado el trabajo más complicado, te será mucho más fácil completar el resto del trabajo.
6. Siempre revisa tus notas antes de comenzar una tarea.
Antes de comenzar cada sesión de estudio, revisa tus notas a fondo para asegurarte de que sabrás cómo completar la tarea correctamente. Revisar tus notas te ayudará a recordar temas importantes aprendidos durante el día y a conseguir que tu estudio sea específico y efectivo.
7. Procura no distraerte mientras estudias.
Todo el mundo se distrae con algo. Quizás sea la televisión. O tal vez sea tu familia. O tal vez el ambiente esté inusualmente tranquilo para ti. Algunas personas de hecho estudian mejor con un poco de ruido de fondo.
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Cuando uno está distraído mientras estudia (1) pierde su línea de pensamiento y (2) no puede concentrarse. Antes de comenzar a estudiar, encuentra un lugar donde no te molesten ni te distraigan. Para algunas personas, éste podrá ser un cubículo silencioso en la biblioteca. Para otros un área común con escaso ruido de fondo.
8. Revisa tus notas, tareas escolares y otros materiales de clase durante el fin de semana.
Los estudiantes exitosos revisan lo que han estado aprendiendo durante los fines de semana. De esta manera, se encuentran bien preparados para continuar aprendiendo nuevos conceptos que se basan en cursos previos y en el conocimiento adquirido la semana anterior.
Estamos seguros de que si desarrollas los hábitos descritos anteriormente, verás una mejora importante en su éxito académico. Quizá no puedas implementarlos todos tan pronto como te lo hayas propuesto, pero recuerda que la práctica hace al maestro.
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